Año 15 | Número 197 OCT 2025
ENTREVISTAS
Texto completo de la catequesis del Papa León XIV en el Jubileo de los catequistas
Aciprensa
Por Papa LeonXIV
27-09-2025
Con motivo del Jubileo de los catequistas, el Papa León XIV se encontró con miles de peregrinos en la Plaza de San Pedro, ante quienes este sábado recordó la necesidad de hacerse pequeños para poder “intuir” las cosas de Dios.
A continuación, el texto completo de la catequesis del Papa este 27 de septiembre:
Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días y bienvenidos!
El Jubileo nos hace peregrinos de esperanza, porque intuimos una gran necesidad de renovación que nos concierne a nosotros y a toda la tierra.
Acabo de decir “intuimos”: este verbo – intuir – describe un movimiento del espíritu, una inteligencia del corazón que Jesús reconocía sobre todo en los pequeños, es decir, en las personas de alma humilde. A menudo, de hecho, las personas sabias intuyen poco, porque presumen de saber. En cambio, es hermoso tener todavía espacio en la mente y en el corazón, para que Dios pueda revelarse. ¡Cuánta esperanza cuando surgen nuevas intuiciones en el pueblo de Dios!
Jesús se alegra de esto, está lleno de gozo, porque se da cuenta de que los pequeños intuyen. Tienen el sensus fidei, que es como un “sexto sentido” de la gente sencilla para las cosas de Dios. Dios es sencillo y se revela a los sencillos. Por eso existe una infalibilidad del pueblo de Dios en el creer, de la cual la infalibilidad del Papa es expresión y servicio (cf. Concilio Ecuménico Vaticano II, Lumen gentium, 12; Comisión Teológica Internacional, El sensus fidei en la vida de la Iglesia, 30-40).
Quisiera recordar un momento en la historia de la Iglesia, que muestra cómo la esperanza puede venir de la capacidad del pueblo de intuir. En el siglo IV, en Milán, la Iglesia estaba desgarrada por grandes conflictos y la elección del nuevo obispo se estaba convirtiendo en un verdadero tumulto. Intervino la autoridad civil, el gobernador Ambrosio, que con una gran capacidad de escucha y mediación devolvió la calma. El relato cuenta que entonces una voz de niño se alzó gritando: “¡Ambrosio obispo!”. Y así también todo el pueblo pidió: “¡Ambrosio obispo!”.
Ambrosio ni siquiera estaba bautizado, era solo un catecúmeno, es decir, se preparaba para el Bautismo. Sin embargo, el pueblo intuyó algo profundo de este hombre y lo eligió. Así la Iglesia tuvo uno de sus obispos más grandes, y un doctor de la Iglesia.
Al principio Ambrosio no quiso, incluso huyó. Luego comprendió que aquello era una llamada de Dios, entonces se dejó bautizar y ordenar obispo. ¡Y se convirtió en cristiano siendo obispo! ¿Ven qué gran regalo hicieron los pequeños a la Iglesia? También hoy esta es una gracia que pedir: ¡convertirse en cristianos mientras se vive la llamada recibida!
¿Eres mamá, eres papá? Vuélvete cristiano como mamá y papá. ¿Eres empresario, obrero, maestro, sacerdote, religiosa? Vuélvete cristiano en tu camino. El pueblo tiene este “olfato”: comprende si nos estamos volviendo cristianos o no. Y puede corregirnos, puede indicarnos la dirección de Jesús.
San Ambrosio, con los años, devolvió mucho a su pueblo. Por ejemplo, inventó nuevas formas de cantar salmos e himnos, de celebrar, de predicar. Él mismo sabía intuir, y así la esperanza se multiplicó. Agustín fue convertido por su predicación y fue bautizado por él. Intuir es una forma de esperar, ¡no lo olvidemos!
También así Dios hace avanzar a su Iglesia, mostrándole nuevos caminos. Intuir es el olfato de los pequeños para el Reino que viene. ¡Que el Jubileo nos ayude a hacernos pequeños según el Evangelio para intuir y servir los sueños de Dios!
Nigeria: más de 7.000 cristianos asesinados en 2025 mientras el mundo hace silencio
Un informe denuncia que más de 7.000 cristianos han sido asesinados y casi 8.000 secuestrados en Nigeria en lo que va del año.
DERECHA DIARIO
Por ALAN ARES
16-09-2025
La persecución religiosa contra los cristianos en Nigeria se ha convertido en una tragedia silenciada. En lo que va de 2025, al menos 7.087 cristianos fueron asesinados y otros 7.800 secuestrados, según datos de la organización International Society for Civil Liberties and Rule of Law (Intersociety).
Esto significa un promedio estremecedor de 30 muertes y 35 secuestros diarios por profesar la fe cristiana.
Cristianos, blanco de la violencia islamista
Lejos de ser hechos aislados, las matanzas responden a un patrón de ataques sistemáticos contra comunidades cristianas. Entre los principales responsables se encuentran milicias fulani radicalizadas, así como grupos extremistas islámicos como Boko Haram y la Provincia Oeste de Estado Islámico (ISWAP).
Las regiones más afectadas son el Middle Belt, estados del norte y del sudeste. El estado de Benue es un ejemplo doloroso, con cientos de cristianos masacrados en junio durante la matanza de Yelewata. Estas comunidades no son víctimas de conflictos “territoriales” como sostiene el gobierno, sino de una campaña de terror que busca borrar la presencia cristiana en Nigeria.
La inacción del gobierno y el silencio internacional
El informe de Intersociety denuncia la falta total de protección del gobierno nigeriano. Los responsables rara vez son capturados, las fuerzas de seguridad llegan tarde y las comunidades quedan indefensas frente al avance de los radicales.
Las autoridades intentan minimizar la crisis al atribuirla a disputas “étnico-territoriales”. Esta narrativa diluye la realidad: se trata de persecución religiosa. Los cristianos son asesinados por su fe, sus iglesias son destruidas y miles de familias han tenido que huir para salvar la vida.
Lo más grave es el silencio internacional. Mientras organismos y gobiernos occidentales se muestran rápidos para condenar otras causas, cuando se trata de defender a los cristianos perseguidos impera la indiferencia.
Una persecución que podría derivar en genocidio
Organismos de derechos humanos ya advierten que la situación podría calificarse como genocidio si continúa esta escalada. La pasividad del Estado y la complicidad del silencio internacional alimentan la violencia, dejando a los cristianos abandonados frente al extremismo islamista.
Lo que está en juego no es solo la vida de miles de personas, sino también la libertad religiosa y el derecho de los cristianos a vivir su fe sin miedo. Urge que se reconozca la magnitud del problema y que se ejerza presión internacional para que Nigeria cumpla con su deber de proteger a sus ciudadanos más vulnerables.
Su trayectoria periodística abarca el período 1970-1985, como analista política y cronista parlamentaria desde el Congreso Nacional para varias radioemisoras del interior del país y también para el vespertino La Razón.
En 1975, fue distinguida con una beca como periodista parlamentaria por la Asociación de Corresponsales de las Naciones Unidas para cubrir la XXXI Asamblea General de la ONU.
Es creadora y directora de Plataforma Cero.